Este tarde esta lloviendo en Victoria, llovizna, tal parece que se viene una estación lluviosa.
Mi madre siempre decía que el agua es la "gran reguladora de la temperatura", pues creo yo, que la lluvia "es la gran reguladora de mi estado de animo".La lluvia tiene para mi esa magia de imprimirle poesía a los días de mi vida, siento una gran esperanza a pesar de todo cuando comienza a lloviznar. No se a que atribuir el efecto que la lluvia provoca en mi estado de animo, no lo se!.
Buscando en mi cabeza encuentro rezagos de pequeñas historias de la infancia "momentos almibarados "de aquella época en donde fui inmensamente feliz con pequeñas grandes cosas., Viene a mi mente aquellas tardes donde luego de una lluvia mama y papa nos llevaban a Noe y a mi a "chapotear" con botas de lluvia en algún "charquito" que se formaba en las ondulaciones del parque de nuestra casa en Garin, eramos unos críos, disfrutamos mucho ese juego.
También me gustaba encontrar con mi hermana y mama "perritos del agua", "ampularias" y batracios luego de la lluvia, era para nosotros una aventura.Mama por entonces pensaba que iba a ser biólogo, me fascinaban todos los animales desde el mas minúsculo al mas grande.
Tampoco pueden olvidarse las "tortas fritas" que preparaba mama y la abuela las tardes de lluvia, mientra escuchábamos el agua golpear sobre el techo de chapa... tarde de lluvia tortas fritas y café con leche.
Hoy estoy algo grande, mi humor hoy tambalea a pesar de la lluvia....Mama ya "no esta físicamente conmigo", no vivo mas en la "quinta de Garin", nuestra "modesta casa" seguramente fue demolida para construir un deposito,el parque mas que seguro no alberga la diversidad biológica que antes ostentaba(si aun existe), no me he convertido en biólogo soy un operador jurídico (así me nombro el titulo es de abogado), pero la lluvia sigue siendo mágica en mi. Triste es la tarde para mi, pero cuando asomo a la puerta me "empapo" de esperanzas, por eso le vuelvo a pedir a "los cielos que nunca dejen de llorar por vos y por mi".
